A un golpe del bronce. Resumen de la XII jornada de los JJOO de Río 2016
Tiene 18 años, por lo que hace cuatro, cuando se dio rienda suelta a este último ciclo olímpico, el madrileño tenía 14…y con 14 inició la búsqueda de su sueño, del sueño olímpico. Desde entonces y hasta esta misma madrugada ha estado siempre en lo más alto de todos aquellos torneos a los que ha logrado acceder. Su recorrido en juventud ha sido sencillamente brillante pero, a pesar de ello, un complejo sistema de ranking olímpico le impidió entrar por ranking en los JJOO, debiéndoselo jugar todo en el preolímpico, un difícil preolímpico que logró pasar con nota y con el billete a Río en el bolsillo.
El sueño olímpico. Jesús (-58Kg) había llegado al combate por el bronce tras un renqueante inicio de torneo, donde en un duelo desigual y en el que se vio a un Jesús titubeante y algo sobrepasado, cedía ante el chino Zhao, a quien el destino tenía guardada la presea de oro. Con el chino en la final Jesús entraba en el camino largo de la repesca, iniciando ese nuevo objetivo ante el marroquí Omar Hajjimi, vencedor del iraní Farzan, a quien Jesús derrotaba por 4-1.
Ahora, en el combate definitivo, Jesús buscaba el bronce, pero también el momento, el espacio, el golpe que durante casi los seis primeros minutos no había podido encontrar. El dominicano estaba desarrollando una estrategia aparentemente inquebrantable, bloqueando cualquier movimiento de un Jesús que parecía no ser consciente de lo que quedaba. La ventaja era muy amplia y los segundos pasaban sin remedio. El isleño había cuajado un notable combate, marcando diferencias desde un primer asalto que cerró 1-0 a su favor y un segundo en el que se escapó con un inquietante 5-0.
Jesús redujo la diferencia en el marcador (5-1) – que no en el dominio del combate – durante el último asalto, pero con cinco segundos en el electrónico ya estaba todo hecho. De repente, casi de la nada, Jesús se inventa una acción de giro que impacta con fuerza en el peto de Luisito Pie para empatar un duelo que estaba perdido. Era el último segundo y Jesús lo había vuelto a hacer. Habría punto de oro. Habría un máximo de dos nuevos minutos de lucha, justo hasta que uno de los dos impactará un golpe certero sobre el otro.
El tiempo extra fue otro cantar. Los dos taekwondistas fueron al límite. A punto estuvo de subir al marcador un golpe de Jesús al que le faltó algo de potencia. Poco después, Jesús se echó hacia adelante para meter puño y el dominicano aprovechó ese espacio para clavar el golpe más doloroso del combate, el que apartaba al madrileño de un bronce que tenía al alcance a falta de poco más de 20 segundos. Quinta posición final para Jesús. Fin de un bonito sueño que seguro será inicio de muchos otros de los que disfrutará el taekwondista español. Gracias, Jesús. Seguimos.
Paleando hacia el oro
Brutal. El K2-200 de Saúl Craviotto y Christian Toro está en un momento óptimo. Si deslumbraron en el preolímpico, lo visto ayer en el canal olímpico carioca no hace sino certificar la seria y consistente opción a medalla que representa el dúo español en una difícil prueba donde el más mínimo error te deja fuera de combate. Doscientos metros no dan para mucho, aunque en el caso de Saúl y Christian den para sacar una notable ventaja a sus rivales. Falta mucho, lo más complicado, pero la pareja española fue primera ayer en su serie de clasificación y se metieron de forma directa a la final, a la que llegarán más descansados que varios de sus rivales, que sí debieron disputar la ronda de semis. Saúl no se cansa y viene a por doblete. Quién sabe si…
Si Craviotto y Toro estuvieron en lo más alto, al segundo peldaño de su semifinal se subió el balear Sete Benavides en la distancia corta de la canoa (C1-200). Dominando bien su serie, el de Pollensa se colaba en la final tras ser segundo en su semifinal tras el brasileño Queiroz, quien se antoja como el gran rival a batir en la lucha por el oro. Hoy debe ser el día que un siempre cumplidor Sete Benavides se cuelgue del cuello su primera presea olímpica.
Como siempre en los JJOO, fundamental el papel que el Piragüismo juega en el medallero español. Llevamos dos y se espera alguna más. ¿Se me oye?
Esperando
Ahora, con la perspectiva que ofrece el devenir del tiempo, uno se convence que nunca dos derrotas y un pésimo partido ante Nigeria hubieran servido para tanto. La teoría de la acción-reacción se cumple a la perfección en un equipo que, siéndolo más que nunca, llega a semifinales del torneo olímpico con muchos números de ponerle, más que nunca, las cosas imposibles a los estadounidenses.
España jugó otro partido muy serio. Con la intención clara desde el pitido inicial de sentenciar el partido cuanto antes, de olvidarse de las pájaras -cosas del pasado reciente- y de los últimos cuartos abocados al sufrimiento; para ello, los Gasol, Rubio, Fernández y Mirotic bordaron cada fase del juego como si del último se tratara. Así, desbordaron la resistencia gala inicial que permitió que los de Parker sólo llegaran tres abajo al final del primer cuarto, para en unos segundos diez minutos excelentes marcar un ilusionante y merecido 43-30.
Nada de relajación ni frivolidades. El segundo cuarto no fue solo un paso intermedio para los últimos diez minutos, sino que los de Scariolo lo aprovecharon para ampliar más aún la diferencia frente a una selección, la vecina, que nada podía hacer ante el vendaval de los españoles…y de los 20 a los 25. 92-67 para España con pase a la semifinal incluido y la sensación, bella y coherente, de que estos hombres pueden con todo.
Mirotic sumó 23 puntos con un 5/8 en tiros de tres y con un notable Willy Hernángomez (16) firmaron una muy buena actuación ofensiva. Ricky Rubio y Juan Carlos Navarro fueron los líderes en las asistencias, cinco cada uno, mientras que Pau con 8 y Willy y Nikola con 5 cubrieron el rebote en este festival español.
Espera Estados Unidos…aunque visto lo visto, igual es España la que está esperando a que vengan los Estados Unidos. ¿Pedante? No, por favor, dejémoslo en ilusionado, pero es que este equipo inspira mucha confianza; en su mejor versión, por supuesto. ¿Coincidimos?
Más Guerrero
No hizo el mejor resultado del atletismo español en esta nueva jornada de Juegos Olímpicos, tan siquiera logró el acceso a la ronda de semifinales de los 800m femeninos, pero lo que ayer hizo Esther Guerrero en su serie de 800m me pareció sencillamente magistral y claramente destacable, magistral por su coraje y valentía, por su entereza y por su sonrisa final en saber que lo había dado todo; y eso es ya una victoria.
Cierto es que no tenía nada que perder, quizás tan solo el atormentarse a posteriori sobre qué hubiera pasado si lo hubiera hecho, y eso a veces es más que suficiente para decidir hacer lo que hizo. Esther hizo su carrera a sabiendas que sólo quedar entre las dos primeras o realizar una muy buena marca podría llevarle a semis. Marcó su ritmo y estiró un grupo que, estupefacto, no llegaba a entender qué pasaba.
Alargó la agonía, la carrera, las zancadas y en una recta que todos quisimos hacer más corta, fue alcanzada en última instancia por otras dos atletas que le birlaron el sueño de las semifinales, pero no el de dar todo lo que llevaba. ¿Locura? Yo lo llamaría orgullo , superación…pero eso ya es cosa de cada uno que, como bien decía el maestro Joan Manel Serrat, «cada quien es cada cual y baja las escaleras como quiere».
A nivel de resultados, el gran protagonista español de la jornada atlética fue Bruno Hortelano. El atleta español corrió una de las tres semifinales junto a monstruos de la velocidad como Gatlin, Blake, Martina y Edward Alonso. Fueron finalmente estos dos últimos los que coparon las dos plazas por puestos que en la semifinal se otorgaban, siendo cuarto Bruno con un tiempo de 20.16, a tres centésimas de Gatlin (20.13) y 24 mejor que el jamaicano Yohan Blake, sexto con 20.37. Fantástico Bruno y fantástico su futuro.
También inició ayer su paso por los Juegos el decatleta Pau Tonnesen. Tras las cinco primeras pruebas marcha 22º con un total de 3984 puntos tras marcar 11.32 en los 1000m, 7.33 en longitud, 13.69m en peso, 2.01 en altura y 50.81 en los 400m lisos. Hoy segunda jornada del decatlón y el español que deberá luchar por mejorar esa 22ª posición.
Malos resultados del resto de la delegación española presente en la jornada atlética. Javier Cienfuegos no lograba acceder a la final de martillo cayendo en la clasificatoria con un mejor lanzamiento que no superaba los 70m (69.73m), cerrando su participación olímpica en la 27ª plaza sobre un total de 32 lanzadores.
Por su parte y ya en los 5000m, 23ª plaza final para Ilias Fifa con un tiempo de 13:30.23, 30ª para un Adel Mechaal que paraba el crono en los 13:34.43 y 44ª para un Antonio Abadía que marcaba un crono de 14:33.20.
Un Sergio de final
Estará en la final, en la de los 35 mejores de la competición olímpica. Sergio Álvarez Moya y Carlo, el mejor binomio español en la modalidad de saltos ha logrado una exquisita clasificación para la gran final de los JJOO tras un tercer recorrido en el que el español penalizaba con seis puntos. Su dos ceros en los dos primeros recorridos de días precedentes le permitieron sumar un total de seis puntos, alcanzado la 17ª posición final y el correspondiente pase a la final, donde todos los caballos clasificados realizarán dos nuevos recorridos y donde no se arrastra lo conseguido hasta ahora.
Como reserva está en estos momentos otro binomio español, el formado por Manuel Fernández y U Watch, el que tras el nueve de ayer y el 4-4 de las dos primeras rondas lo retrasaban hasta una 38ª posición con un total de 17 puntos. Será el viernes 19 cuando el Centro Olímpico Ecuestre de la ciudad janeirense degustará una competición de saltos al más alto nivel y con presencia española…mucho tiempo desde la última.
Lo quieren todo
Ahí están. Dijeron que venían a por todas y, tras el primer recorrido, ya lo están demostrando. Como acabe la larga historia de la competición del golf femenino será una cosa, pero otra muy diferente es que tanto Carlota Ciganda como Azahara Muñoz van a darlo todo en los cuatro recorridos que se van a celebrar en el torneo femenino de Río 2016.
Ayer, en la primera jornada, Carlota y Azahara finiquitaron sus primeros 18 hoyos. Carlota lo hizo en un T4 con 67 golpes y cuatro bajo par, mientras Azahara era T7 con un golpe más (68) y tres bajo par. Falta mucho, mucho, mucho, pero algo de lo que vienen a buscar ya está hecho. Ahora habrá que hacer, cada día, un poco más. Se puede, claro que se puede.
Comentarios recientes