Federación Española de Rugby

·Las leonas rompen el físico de una temible selección rusa para sacar un histórico pasaporte a los JJOO de Río

·Las leonas llegaban a la final ante Rusia después de cinco contundentes victorias y ni un solo punto encajado.

Ángel Vázquez, @PasaporteJJOO

Siete días después del éxito del seven masculino, pocos creían en el milagro del Seven femenino en el preolímpico que este fin de semana se ha venido disputando en Dublín fuera factible. Rusia, principal opositora a la única plaza en disputa, se preveía un auténtico obstáculo insalvable, un muro físico imperturbable e insalvable para el siete español. Sin embargo, como ocurriera con los chicos y ante Samoa la pasada semana, Dublín volvió a demostrar el valor y la importancia del equipo y de una exquisita concepción táctica del rival.

España llegaba a la capital irlandesa para luchar frente a otras 15 selecciones por la única plaza puesta en venta para los JJOO de Río. En la fase de grupos, las leonas se mostraban intratables ante los combinados de Túnez (28-0), Venezuela (21-0) y Méjico (38-0), meras comparsas ante un siete español que ni hacía aguas ni daba sensación alguna de debilidad.

Ya en cuartos, el equipo español seguía en su línea, volteando  a Kazajstán por 28-0 como previa otro roscón al más puro estilo navideño frente a China (21-0) en las semifinales del torneo.

Llegaba la hora de la verdad, la de la final de un preolímpico largamente esperado. Rusia, como era previsible, el rival, un equipo eminentemente físico que se presentaba en el último duelo del torneo como claro favorito. Sin embargo, el siete español salió concentrado y a por todas, dominando unos primeros minutos que sirvieron para que Patricia García ensayara por partida doble y llevara el marcador hasta un potente 0-14. A poco del final, Bobkova hacía subir el 7-14 con el que se cerraba la primera mitad del duelo.

Ya en la segunda mitad, la fuerza de Bárbara Pla era del todo decisiva para sumar un nuevo ensayo que dibujaba un 7-19 que, si bien se planteó como definitivo, sí que ponía en franquicia la victoria española. Las dudas aparecieron poco después cuando, nuevamente Bobkova, realizaba otro soberbio ensayo para el 12-19.

Rusia lo intentó como siempre, pero el siete español lo defendió como nunca para certificar, con una patada final del oval por parte de Patricia García a la grada con el tiempo cumplido, la presencia española en los próximos JJOO de Río de Janeiro. El seven, en su primera presencia olímpica, tendrá doble representación española.