·En el partido decisivo, España ha vencido a Canadá por un ajustado marcador de 8-7

·Un tercer cuarto de parcial (3-0), clave para que España rompiera de forma decisiva el partido

Ángel Vázquez, @PasaporteJJOO

No ha sido fácil; ni el partido, ni el preolímpico, ni estos últimos cuatro años. Tras pasar por los Juegos Olímpicos de Londres, el combinado español pareció entrar en un bajón de difícil remedio. No se fue al Mundial, ni se logró la redención en el  Europeo y, mientras tanto, las dudas no paraban de crecer. Además, el primer partido de preolímpico frente a los Países Bajos incrementó las dudas. Los de Gabi Hernández no supieron jugar a los neerlandeses en un extraño partido y una primera y dura derrota parecía sentenciar al siete español a las primeras de cambio.

Luego se ganaría a Alemania en un último cuarto decisivio, como decisivos fueron los primeros en el duelo ante una Italia que salía derrotada frente a los de Gabi en el tercer partido de la fase de grupos. Con superioridad aplastante se pasaba por encima de las dos comparsas en este grupo del preolímpico, Sudáfrica y Kazajstán, presentándose así como tercera de grupo en la ronda de cuartos de final.

Hoy, por fin, era el gran partido, el partido de los cuatro años, el que decidía si Gabi Hernández, cuestionado partido sí partido también, pero también sus jugadores, estarían en Río. Hoy se lo han jugado todo y en la apuesta, en forma de órdago, han salido victoriosos.

España ha planteado un partido tranquilo, trabajado desde el primer minuto y, sobre todo, con la mente centrada en el objetivo único: la victoria. No había prisas, había que buscar el momento justo para irse en el electrónico aprovechando un hipotético pero previsible bache canadiense. Pasó el primero y el segundo cuarto, y con un 4-3 al descanso (Guillermo Molina (3, 2p) y  Ricard Alarcón (1)), Canadá seguía viva. A remolque, pero viva.

Tras el descanso llegó el momento esperado. Daniel López Pinedo seguía parándolo absolutamente todo y en su excelencia empujó desde la portería española a un ataque que, de la mano de Echenique por partida doble y Blai Mallarach, cerraban el tercer cuarto con un duro 7-3 tras un parcial de 3-0.

Ya en el último cuarto Canadá apretó a la desesperada el acelerador pero no tuvo suficiente gas para darle la vuelta al marcador. Cuatro goles de Canadá por uno de España cerraron un partido (8-7) en el que los de Gabi Hernández sellaban su Pasaporte Olímpico a Río 2016.

Pocos, a ser sinceros, apostaban por esta selección. Justo sería ahora reconocerle el mérito por tamaño éxito. Hay equipo, lo han demostrado. El waterpolo masculino, al igual que el femenino, estará en Río.