El crol en categoría masculina nunca ha sido el punto fuerte de la natación española, pero la nueva generación de nadadores está volteando la situación y, de partida, son varias las opciones de los nuestros de agarrar el ticket para Kazán.

La primera opción podría llegar en la distancia de los 100 metros, donde el plusmarquista nacional Markel Alberdi tiene opciones de nadar en mínima. El año pasado en la capital alemana paró el crono en 49’25’’, y ahora el reto del nadador vasco consiste en limar dos décimas para coger un nuevo tren. Fuera de competición Bruno Ortiz Cañavate, su hermano mayor Miguel también opta a nadar en la marca solicitada. Aunque sus mejores prestaciones previsiblemente llegarán en la prueba de 50, la mínima en los 100 parece más asequible. Fuera de ellos, no parece que Aitor Martínez esté al nivel exigido, aunque a buen seguro buscará mejorar.

En el doble hectómetro la situación es parecida, habrá calidad y buenos picos de forma en la piscina, pero la mínima se presenta realmente exigente, tanto como casi siete décimas por debajo del Récord Nacional. Víctor Martín saldrá a por ella, al igual que Miguel Ángel Durán, aunque en ambos casos las mínimas, de ser conseguidas, probablemente pasarían más bien por el crono de las series matinales.

Con el medio fondo comienzan las aspiraciones más serias. Dentro ya del 400 hay que volver a referirse al extremeño Miguel Ángel Durán, que está llevando a cabo una temporada realmente notable, y ello junto a su mayor madurez y el haberse centrado en la distancia, le convierten en claro favorito a conseguir una holgada mínima y puede que a nadar por debajo del Récord Nacional del casi mítico Marco Rivera. Pero no acaban con Durán las opciones, ya que Marc Sánchez, dejada atrás su etapa con Vergnoux, opta a mejorarse a sí mismo tras su traslado a Madrid y cambio de grupo de entrenamiento, que parece que han beneficiado más su velocidad que el fondo.

Entrados en el fondo, dos nombres copan el interés; el primero ya ha salido a flote en la distancia anterior, y es que Marc Sánchez sigue siendo nuestro deboramillas por excelencia y a la posible mínima en el 400, podría sumar la del 800 y 1500, que aunque duras parecen al alcance de su progresión. Las mínimas habitan en sus brazos y piernas, y solo queda que su cabeza se lo crea y ponga en orden convenientemente sus recursos. En ninguna de las distancias ha conseguido nadar hasta la fecha en las marcas de referencia y en estos momentos parece más asequible la del kilómetro y medio que la del 800. El segundo nombre es Antonio Arroyo, que está llevando a cabo una temporada realmente exitosa, nadando cerca de sus mejores marcas y consiguiendo un gran Récord Nacional en la distancia de los 5 kilómetros. Sus opciones pasan por la distancia del kilómetro y medio, y de su pugna con Marc podría y debería salir una doble representación en Kazan.