Ona Carbonell en foto de Andrea Fuentes

·La catalana consigue la cuarta medalla para España y la cuarta en su botín mundialista

·Rusia y China acompañaron a Ona en el pódium del solo libre

·Junto a Margalida Crespí, Ona buscará el jueves la quinte en el dúo libre

Sarai Ruiz

Tras una jornada sin finales, la lucha por las medallas ha vuelto a la piscina del Sant Jordi con la disputa de la final de solo libre. La competición se  abría a las 19.00h pero antes, por la mañana, la capitana española ya había comenzado a prepararla. Junto a su entrenadora Mayu Fujiki, iniciaba el día viendo el mítico ejercicio de Gemma Mengual en la final de Roma 09. Una rutina que emocionaba a la joven nadadora barcelonesa y que la arengaba de cara a la tarde.

Con un público entregado, y bajo una gran ovación aparecía en la piscina Ona Carbonell. Enfundada en un bañador diseñado por ella misma y con motivos en su pelo en honor a Monserrat Cabellé, la nadadora del CN Kallipolis se lanzaba a la piscina para interpretar el mítico “Barcelona”. Una rutina que llenaba la piscina de plasticidad, técnica y  sentimiento, sentimiento que finalizado el ejercicio se trasladaba a una emocionadísima Mengual, la cual al igual que Ona por la mañana no podía reprimir las lágrimas. Los jueces no compartían del todo esa emoción y calificaban el “Barcelona” con una corta puntuación: 94.290 (sólo tres centésimas más que en la preliminar del lunes) pero  que sin embargo servía de nuevo a la nadadora catalana para obtener su cuarta medalla. Junto a ella en el pódium los mismos países que en el solo y dúo técnico: China y Rusia. La asiática Huang Xuechen obtenía la medalla de plata gracias a los 95.720 de su “Fantasma de la ópera” mientras que el oro recaía en una rusa enfundada en la mítica ambición rubia: Svetlana Romashina que se hacía con su tercera medalla dorada con una puntuación de 97.340. “

Finalizada la jornada, Ona declaraba el micrófono de Izaskun Ruiz que “me he emocionado nadando, ahora no puedo hablar casi. Gemma y Mayu me han feliciado, me han dicho que increíble…las puntuaciones no las puedo controlar. La china nada sólo una rutina yo hago siete. El bronce puede parecer poco pero es muy difícil de lograr, es importante para mí”

El ritmo no para para la pupila de Esther Jaumà y el jueves junto a Margalida Crespí volverá a tirarse a la piscina, será el turno para la final de dúo libre