No pudo ser. Parecía más que probable que se repitiera en Valencia la final del año pasado, especialmente tras la sorprendente victoria de Marcel Granollers ante Del Potro, pero en un extraño encuentro David Ferrer facilitó el pase a la final de Juan Mónaco. Será pues Granollers nuestro único representante en la final del Open 500 de Valencia del 2011.

Si un tenista español consigue inspirarse en el Ágora, ese es, sin duda, Marcel Granollers. Si ya en cuartos de final demostró ante Gael Monfils que quería volver a repetir su fabulosa actuación del año pasado, en las semifinales ante Del Potro volvió a confirmar que no hay rival al que no pueda batir en Valencia. En un excelente encuentro, amparado en su seguridad desde el fondo de la pista y en ese excepcional juego de red que posee, Marcel eliminó a todo un Juan Martín Del Potro por 6-4, 7-6. Cierto es que el argentino falló más de lo habitual, pero mucha culpa tuvo un Marcel que le incomodó constantemente con imprevisibles variaciones en sus golpes, desde efectos cortados que obligaban a flexionar en exceso al altísimo argentino a dejadas, pasando por impresionantes subidas a la red. Justa victoria de Granollers, que defiende con el pase a la final todos los puntos conquistados el año pasado.

Parecía pues que este domindo reviviríamos la final del año pasado, pero en un extraño encuentro Juan Mónaco eliminó a un desconocido David Ferrer por 7-5, 1-6, 6-3. Quizás la clave estuvo en el primer set, en el que David dominaba por 3-0 y tuvo varias opciones de romper el saque del tenista albiceleste, algo que le hubiera colocado con un doble break de ventaja. Sin embargo Ferrer perdonó y Mónaco comenzó una reacción que el español no pudo cortar, llevándose el albiceleste el primer parcial por 7-5. Como era de esperar, Ferrer no bajó los brazos y recuperando su tenis de esta temporada le endosó un clarísimo 6-1 a Mónaco en el segundo. Incluso llegó a ponerse 2-0 arriba en el inicio del tercer set, y cuando parecía que el partido ya estaba controlado, David se descentró. Le cantaron una falta de pie y desde entonces comenzó a hacer muchas dobles faltas (incluso tres en un solo juego) y a cometer excesivos errores no forzados ante un Mónaco que parecía una muralla desde el fondo. Finalmente el argentino se llevó el tercer set por 6-3, pasando a la final. Lástima Ferrer, él más que nadie quería repetir título ante su público, y más este año, en la mejor temporada de su carrera. Mucha suerte en París.

En la final de este Open 500 Marcel buscará el tercer título individual de su carrera tras sus triunfos en Houston (2008) y Gstaad (2011), ambos en tierra batida. Hasta la fecha se ha enfrentado a Mónaco en dos ocasiones, con una victoria para cada tenista. La nota positiva: el último enfrentamientos fue en los cuartos de final de la pasada edición del Open de Valencia, con victoria de Marcel. Y desde Pasaporte a Londres 2012 apostamos a que hoy se repetirá el resultado. Ánimo Marcel.